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Kabaret Kaput

Kabaret Kaput es un proyecto transdisciplinario, en el cual se destaca el uso de performance, música y vídeo. Presentado en la XV Muestra Internacional de Performance: El sonido de la última carcajada en Ex Teresa Arte Actual, Ciudad de México el 29 de Noviembre de 2012. Dirigido por Víctor Martínez[1], artista plástico mexicano que ha desarrollado piezas en el ámbito de la fotografía, instalación, vídeo y performance.

Martínez nos muestra una diversidad de cuadros performáticos y procesos cuya génesis está ubicada en el año 2002 y que continúan hasta el día de hoy en que los procesos continúan sin divisiones disciplinares claras. Al respecto, en Rethinking dramaturgy, André Lepecki nos da pistas para entender procesos que no se conservan encasillados de una disciplina a otra; sino que pareciera que la casualidad y el error conforman estructuras dramatúrgicas más complejas y ricas en concepto. Por ello, en Kabaret Kaput veo que coexisten tres dramaturgias[2]: sonora, visual y la acción performática.

Víctor Martínez foto: Óscar Sánchez

Dramaturgia de la acción performática: El cuerpo de los interpretes se coloca como objeto y sujeto. La acción trasciende a los espectadores quienes participan y son cómplices. La primera imagen en Kabaret Kaput es Víctor Martínez vestido con atuendo Papal (alba, pluvial y estola) fabricado de papel kraft, y una mitra de papel albanene iluminada por dentro con un foco rojo. El cuerpo del performer denota dureza y estoicismo. Luego, esa figura “Papal” se convierte en una especie de presentador de los performances que van sucediendo una acción y otra. En apariencia la figura del Papa no parece compatible con la decadencia que se muestra en el Kabaret ni con quienes lo conforman, aunque esta figura se convierte en una especie de punctum[3], es decir, un elemento que en apariencia sale de la composición visual pero que dentro de la decadencia nos llama la atención constantemente. La figura Papal de aparente honor, prestigio y respeto, se convierte en el presentador de una sociedad decadente, empobrecida de valores, y deseos trastocados por una moral que no tiene ya límites discernibles.

Posteriormente, aparece un hombre al estilo de saltimbanqui medieval. Él lee poemas mientras transcurren intervenciones simultáneas: una mujer con cuchillos tronando globos, un cantante travestido, bailarines de troica y otros performers desbordan la capilla de Ex Teresa con acciones, movimientos y sonidos.

Katia Tirado y Mirushka Slava
Katia Tirado y Mirushka Slava foto: Óscar Sánchez

Vale la pena destacar el performance de Katia Tirado y Mirushka Slava “No kisses” en la que Katia Tirado lleva un vestido rojo entallado y Mirushka con un estilo más inclinado hacía la tendencia darki suburbana. Ambas suben a un par de sillas ayudadas por Martínez y sus siluetas largas y en paralelo simulan dos torres; un avión de papel recorre el recinto, tal vez un palimpsesto a las torres gemelas de Nueva York o sólo el juego de la altura y lo sublime de lo inalcanzable. Ellas se colocan cinta adhesiva para no poder hablar y se besan sobre la misma cinta. Luego, con unos cubiertos rompen las cintas adhesivas y se besan nuevamente sin obstáculos. Mujeres que denotan una belleza particular, siendo objetos y sujetos del deseo, que no logran tocarse sino hasta que rompen con la cinta que es “lo que las obliga a estar separadas”. Violencia sutil y seducción continúa.

Estamos expuestos, constantemente, a los bombardeos de Martínez acerca de las “Ciudades flotantes” por medio de un infomercial y anuncios que va dosificando mientras bebemos vino o cerveza. La idea de las “ciudades flotantes” parte por un lado de un proyecto de generar lugares para vivir en Júpiter o sobre el mar, reforzando la idea de abortar el plan de la ciudad y buscar algo más. La repartición de volantes y la proyección de videos, nos dejan visualizar esa fantasía junto con las ganas de realización: un lugar ideal para vivir.

Dramaturgia sonora:diecisiete composiciones[4] de la Orquesta Kaput basadas en ruidos citadinos componen la música de la obra. Juegos sonoros con claxon de taxis, melodías de elevadores, ambientes de centros comerciales, el pasar de la gente, manifestaciones sociales que evocan el caos. Además, de reflejar la violencia, propia, de la ciudad de México, dan una lógica al performance, el cual, mantiene una tensión constante entre placer y rechazo. Destaco dos cuadros de la dramaturgia sonora: uno de ellos satiriza las marchas anti Enrique Peña Nieto, actual presidente en México. En él, la orquesta junto con

Orquesta Kaput
Orquesta Kaput foto: Óscar Sánchez

los espectadores ejecutan la acción de manifestarse en modo de evidencia de las últimas votaciones presidenciales, en las cuales la voz de los votantes fue ignorada y burlada por medio de campañas publicitarias y medios masivos de comunicación. Los asistentes comenzaron a gritar junto con los performers: ¡Fuera Peña! ¡Peña vete a la chingada[5]! El performance hace reminiscencia a un Estado que se construye a partir del caos-orden vs legalidad-corrupción.

La canción del final llamada Ojalá es la cúspide de Kabaret Kaput. La canción en clara referencia a su raíz árabe (dios-quiera) enlaza la idea de súplica para “evitar el supuesto fin del mundo” que se profetizó según los códices mayas; asimismo las guerras alrededor del mundo que no terminan de acabarse, es decir, a pesar de ello el mundo continúa. Martínez enfatiza la impotencia resignificando la empatía humana a la vida; juega con la idea de plegaría de continuidad y de finitud.

Dramaturgia visual: Proyección de once[6] cortometrajes diseñados por Víctor Martínez con vídeos originales, animaciones y fotografías. Cortometrajes de luchadores animados colocando a la ciudad en caos y al final mostrando una preferencia homosexual, travestismo, la búsqueda de lugares para vivir en paz dentro o fuera de la ciudad las llamadas “ciudades flotantes” son las imágenes que se fueron proyectando durante la ejecución de Kabaret Kaput.

Kabaret Kaput es la conexión de imágenes, acciones y ambientes sonoros aparentemente inconexos. Acciones que revelan la inconformidad de los ciudadanos de una urbe que no termina por crecer, que no deja de saturarse, ni tiene un desarrollo real. El problema de la masificación es que permite identificarnos en las problemáticas que Martínez plantea, ya que la violencia, la inconformidad, la corrupción la pobreza y a su vez la falta de libertad sexual que como ciudadanos nos identifica. Sonidos que parafrasean la ciudad en anécdotas y sucesos cotidianos. Los performances tienen múltiples imágenes y por ello, quizá múltiples interpretaciones, sin embargo el equipo de Kabaret Kaput logra evidenciar la aglomeración de la ciudad y con ella su sentimiento de frustración, de encierro constante, pero porque no decirlo, al mismo tiempo, de placer, de gozo y disfrute. La ciudad como una peste y una cura, una solución y un problema, un caos y un orden. Dicotomía que a simple vista puede ser simplista y vulgar, pero que encierra el sentido de vivir en la Ciudad de México única y al mismo tiempo común a todas las urbes con sus problemas de saturación y vacío.


Claudia Marín Inclán es licenciada en Literatura dramática y teatro, UNAM. Realiza sus estudios de maestría en artes escénicas en la Universidad Veracruzana. Ha colaborado en asociaciones civiles, internados, hospitales y centros penitenciarios utilizando al teatro como un método composición social y autoconocimiento. Incursionado en la fotografía, la escritura, la danza y el canto como elementos integradores del desarrollo personal y aplicado en comunidades marginales. Las influencias escénicas más importantes provienen de los maestros Héctor Mendoza, Rodolfo Valencia y Hebe Rossel. Actualmente, investiga la inserción de los nuevos medios en las artes escénicas, su impacto en la construcción de espacio/ tiempo y las relaciones de la sociedad mexicana.

Notas

[1] Víctor Martínez (1969), artista plástico mexicano. Egresado de la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado, “La Esmeralda”. Miembro fundador del grupo de Performance 19 Concreto, Director del Centro de documentación Ex Teresa, curador, instalador, proyectos plásticos firmados con el seudónimo VICMARDI y Vyctoria Letal, entre otros proyectos.

[2] Uso el término dramaturgia no como texto dramático sino en el sentido que André Lepecki lo describe: estructuras que dan soporte a las expresiones escénicas que mezclan diferentes disciplinas y con un proceso de conformación dónde el dramaturgo no es una figura de autoridad. Aparece el coordinador en este caso Martínez, quien da cause a las creaciones de los performers. Lepecki, André, Rethinking dramaturgy: Errancy and transformation. 2011. Centro Párraga, Centro de Documentación y Estudios Avanzados de Arte Contemporáneo (CENDEAC), 160-179.

[3] Concepto desarrollado por Barthes, en el cual, explica como un pequeño elemento cobra importancia y relevancia a pesar de su aparente intrascendencia en contraposición con la composición de la imagen. Roland Barthes en La cámara Lúcida, Paídos, Barcelona, 1999.

[4]1. T-vox; 2. Feromona Tenebrae; 3. Cairox; 4. Cooldown Frigobar; 5. Liquid México; 6. Have you; 7. Nocturno muerto; 8. Soltero; 9. Don’t Sit; 10. Fallinglove; 11. Ocumichu Goove; 12. Büyük; 13. No Kisses; 14. Swing Sufi Swing; 15. Run; 16. Ojalá; 17. Pena Ajena. Consultado en archivo personal de Víctor Martínez.

[5] Consignas de las pasadas manifestaciones durante proceso electoral 2012.

[6] 1. T-vox; 2. Feromona Tenebrae; 3. Cairox; 4. Cooldown Frigobar; 5. Nocturno muerto; 6. Soltero; 7. No Kisses; 8. Swing Sufi Swing; 9. Run; 10. Ojalá; 11. Pena Ajena. Consultados en archivo privado de Víctor Martínez.